Mientras caminaba pude apreciar algunas de esas cosas que se ven todos los días y que ya son del paisaje urbano, es decir, esas cosas a las que no les damos bola porque siempre están ahí. Un ejemplo: Hay un señor que hace garrapiñadas que antes de comenzar a cocinar su golosina comienza a golpear la cacerola cual murga uruguya al grito de "¡Sale, sale!", todo con mucho ritmo.
Bien, la cuestión es que cuando voy llegando a la esquina de Av. de Mayo y Perú vi que había mucha gente parada en la esquina mirando para arriba. Obviamente, cuando llegué a la esquina miré y, realmente, lo que vi me sorprendió.
Paradito en la baranda de un balcón había un... ¡carancho! Sí, sí, como lo leyeron. "¡Eso es un halcón!" decía un muchacho, "¿cómo llego ahí?" preguntaba otra señora.
Mientras todos lo mirábamos extasiados, el carancho saltó al balconcito de al lado de donde estaba paradito, desapareció unos segundos y cuando volvió a aparecer tenía en su pico una paloma...
La señora que estaba al lado mío dije "¡Pobre paloma!" Y yo pensé... "y bue, el bicho tiene que comer"
En el momento en el que estábamos en plena deliberación, el bichito levantó vuelo, y pudimos ver cómo con una de sus patas tomaba su almuerzo y se iba por Florida dando un grito que nos dejo a todos mirando con la boca abierta...
En fin, por Florida uno puede encontrar, literalmente, cualquier cosa...
2 comentarios:
Sí? Y que pasó? Bueno, contamelo... No se si vos sabes, no se, bueno... Es una situacion un poco compleja. Es que tendras que venir a Brasil, vivir en Rio si? Sí.
jaja, mi hermano vio un pájaro de características aguileñas una vez en el balcón de mi casa y todos pensamos que se había drogado.. jjaa, era verdad!
beso!!
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